sábado, 23 de abril de 2016

AMAR... SÍ, PERO COMO ÉL NOS AMA


Quinto Domingo de Pascua.

El Evangelio de San Juan nos presenta a Jesús, durante la noche de su Pasión y adoctrinando a sus apóstoles, sentados a la mesa:

"Les doy un mandamiento nuevo: Ámense los unos a los otros. Esta será la señal por la que todos conocerán que son mis discípulos" (Jn 13, 31-35).

Hermosas palabras, y sin duda que podríamos detenernos bastante para comentarlas. Te invito a reflexionar en una sola idea:

El Señor dice que "la señal" por la que el mundo conocerá que somos suyos es "el Amor", y que hay que amar como Él nos ha amado...

¡La cosa está clara!

Frecuentemente nos debatimos en buscar las fórmulas secretas para poder demostrar a quienes ocupan un lugarcito en nuestro corazón que las queremos. Por eso compramos cosas, regalamos peluches, obsequiamos joyas, inventamos versos, compartimos chocolates, contratamos serenatas, pagamos vacaciones... pero no siempre "damos en el clavo", o a veces aunque nos esforzamos mucho y nos desgastamos al límite, los resultados no siempre son halagadores... El camino es sencillo: Para saber amar, hay que hacerlo así, como lo hizo Cristo.

Y cabe aún la pregunta: ¿Qué fue lo que hizo Jesús para demostrarnos su amor?

Y aunque sabemos la respuesta, en ocasiones la ignoramos, por conveniencia: Murió para salvarnos...

No de balde nuestro Señor dijo en otro pasaje del Evangelio: "No existe amor más grande que dar la vida por los amigos" (Jn 15, 13).

¿Quieres demostrar tu amor? Aprende a morir... para dar vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario