Aunque
es el nombre femenino más socorrido entre los católicos (solo o acompañado de
algún otro apelativo), su significado es muy discutido… hasta casi setenta
etimologías diferentes se han propuesto para definirlo… sin llegar a consensos…
La
primera vez que encontramos este nombre en la Sagrada Escritura es en el libro
del Éxodo (Ver Ex 15, 20): María es
hermana de Aarón y de Moisés, y ostenta el título de “profetisa”… sin embargo,
es más por los méritos de la Madre de Dios, de la Santísima Virgen, por quien
se atiende al nombre para su uso frecuente…
Atendiendo
a la etimología egipcia, “María” proviene de dos palabras: la raíz “Myr” (o
“Mr”), correspondiente al verbo “amar”; y “Yam” (o “Yah”), la contracción del
nombre divino “Yahvé”. En este caso, el significado del nombre sería “la amada
de Dios” o “la hija predilecta de Yahvé”.
Por
otro lado, algunos autores señalan que “María”, en hebreo, significa “Hermosa”;
otros, que “Estrella del Mar”. Así, ambos nombres han encontrado diversas
significaciones teológicas para referirse a la Santísima Virgen: señalándola
como la “toda hermosa y sin defecto” (Ver Cant
4, 7), o como “la estrella que orienta a puerto seguro a los navegantes” (es
decir, la que dirige a los cristianos a la Patria eterna).
También
se han propuesto algunas raíces arameas: el verbo “Marah”, que significa
“Dominar” (del que se desprende el sustantivo “Marya´”, que podría traducirse
como “Señor”). En este caso, “María” significa “Señora” o “Princesa”
(manteniendo cierta afinidad con el nombre “Saray”).
Otros
autores señalan que habría que atender más bien a la palabra “Mir – yam”,
término compuesto por “Mir” (o “Me´ir”, que significa “El que ilumina”), y
“Yam” (o “Yah”, contracción de “Yahvé”). Siguiendo esta etimología, “María”
sería “Dios ilumina” o “Luz de Yahvé”…
Con
el paso de los siglos y atendiendo a las diferentes lenguas, actualmente
existen muchas variantes del nombre. Entre estas destacan:
- “Mary” (en inglés).
- “Marie” (alemán, checo, francés y lenguas nórdicas).
- “Maria” (catalán, griego,
holandés, italiano y portugués).
- “Marija” (en esloveno).
- “Meryem” (turco).
- “Miren” (en euskera).
- “Mireia” (catalán y valenciano).
Sea
cual sea el verdadero origen del término, este bello nombre era el que, según
la Sagrada Escritura, tenía la joven nazaretana que fue visitada por un Ángel
para preguntarle si aceptaba ser la
Madre de Dios…
No hay comentarios:
Publicar un comentario