Según los
diccionarios, la melancolía se puede definir como una tendencia permanente a
estar triste... es algo así como "la felicidad de encontrarse
infeliz"... Rara enfermedad, ¿Verdad?
Sin embargo,
actualmente es muy común que tanto jóvenes como ancianos la padezcan, es
frecuente en todos los ámbitos de la vida humana, en todos sus niveles y en
todos sus estatus... se podría decir que la dicha la hemos vendido, al mejor
postor y a muy bajo precio...
Sí, la vida es
"difícil", y "lo que vale" realmente "cuesta"...
tal parece que con el paso de los años se nos ha ido diluyendo la heroicidad,
esa fuerza innata para plantearnos retos y hacer lo posible por conseguir
nuestras metas... hemos olvidado la resiliencia, esa capacidad de sobreponernos a las dificultades o experiencias dolorosas de nuestra vida... se nos han caído los sueños, nos hemos dejado mancillar con
el barro de los siglos, y hemos permitido que las crisis nos arrebaten la
sonrisa... y sin mesura...
Melancolía
barata... estado putrefacto de la vida... pérdida del valor de nuestra
existencia... corrupción de los sentidos... atrofia de nuestros proyectos...
Hoy es un
excelente día para despertar nuestro gigante en reposo... permite que tu sed de
infinito sea saciada y rejuvenecida con una muy buena dosis de motivación...
deja que Dios cambie tu tristeza en alegría, y troque tu melancolía en
ilusión...
Tal vez así experimentemos "la alegría del amor"...
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